Rafael Catalá, Ministro de Justicia, anunció ayer en el Pleno del Congreso de los Diputados que la reforma del Registro Civil incluirá la inscripción de los nacimientos por gestación subrogada, es decir, los nacimientos por vientres de alquiler, en cumplimiento con la doctrina del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que defiende el derecho de filiación de estos menores.
La demanda ya contaba con más de 85.000 firmas de apoyo y finalmente han logrado llevarla a cabo. La enmienda incluye dos puntos básicos:

  • El reconocimiento de la filiación de sus hijos, es decir, que se reconozcan los mismos progenitores que aparecen en la partida de nacimiento del país donde nació.
  • El acceso al Registro Civil por trámite administrativo, permitiendo que el menor obtenga la nacionalidad española y, por tanto, el DNI y el pasaporte.

El titular de Justicia ha recordado que la reforma refuerza las medidas médicas y biométricas para asegurar la filiación materna y poner fin a cualquier caso de bebés robados. Por tanto, este texto obligará al personal de los centros sanitarios a comunicar los nacimientos y defunciones a las oficinas del Registro Civil. La solución hasta ahora era acudir Estados Unidos y pagar más de 150.000 euros por el alquiler del vientre, por ello pocas familias podían permitírselo. Muchas de las parejas que optan por esta vía para poder ser padres son homosexuales o parejas heterosexuales con problemas de fertilidad.

Gracias a la reforma, se estima que los ciudadanos que utilicen este sistema, se ahorren 64 millones de euros.